Os prometo que quería escribir un divertido post sobre la investidura de Rajoy, la ausencia de los Riveras, los problemas psicológicos de los socialistas o los nuevos negocietes de los de Podemos, pero no sé cómo, siempre acabo escribiendo de lo mismo, el terrorismo de género.
Alguno debe verme como una loca contando todo el día micro-machismos mientras empuño una espada, cuál guerrera griega, dando ‘zascas’ a todo el que levante su ego varonil y no varonil, que ‘de haberlas haylas’, aunque no creo en ellas. Pero qué hacer cuando día a día, la realidad se supera a sí misma, cuando de las violaciones en grupo, pasamos a la violación y asesinato, al violador con permiso que vuelve a violar y acuchillar; y llegamos al jueves con el asesinato de una colega en Burgos, a manos de su expareja. Y así en bucle.
Espero que aquí ya nadie se pregunte que nos ocurre y por qué tenemos miedo ¿no? No os creáis, yo también me hago muchas preguntas, como por ejemplo ¿por qué tengo que tener miedo? ¿Por qué tengo que tener miedo a ir a algún sitio sola? ¿Por qué tengo que tener miedo al entrar a mi portal de noche? ¿Por qué tengo que tener miedo a emborracharme en una fiesta? ¿Por qué tengo que tener miedo a una ruptura? Y llegados aquí, ahora os pregunto a vosotros si habéis encontrado respuesta a mis porqués. Yo tampoco. Hasta ahora creía que quizás era yo la enferma, pero ahora sé que es la sociedad entera la que está enferma, así que habrá que ir directamente al origen, diagnosticar y tratar. ¿O va a tener que venir Leonardo Di Caprio con otro documental para que nos demos cuenta que aquí ocurre algo?
Y finalizó el post nombrando a los mismos con los que empecé: rajoys, riveras, socialistas, podemitas y demás representantes, el verdadero problema está ahí fuera, por favor, uníos, luchad y combatid esto de una vez porque ¡VA EN SERIO, TENEMOS MIEDO!
